Tengo la suerte de que desde hace unos años me regalan un montón de calabazas blancas de las que se utilizan para hacer Cabello de Ángel. Por esta zona se plantan mucho , la mayoría con destino a confiterías y empresas que lo comercializan.
Pero me dan tantas que no sé qué hacer con ellas!
Hago mucho y voy regalando botecitos aunque no a todo el mundo le gusta este dulce por eso mismo...porque es muy dulce.
Yo creo que el que hago yo no lo es tanto porque no utilizo tanta azúcar como en la receta original.
Ingredientes
Calabazas Blancas de Cabello de Ángel
Azúcar
Corteza de Naranja
1 ó 2 Palitos de Canela
Opcional anís en grano si te apetece darle otro toque.
Lavamos y Partimos la calabaza ( Yo la dejo caer para que se abra sola)
En algunas recetas se parte a trozos y se pone a hervir con corteza.
Yo con paciencia y cuidado le quito toda la corteza haciendo palanca con el cuchillo entre la corteza y la carne de la calabaza.
En una olla amplia ponemos agua a calentar e iremos introduciendo los trozos de calabaza.
Dejaremos hervir hasta que veamos la calabaza blandita.
Tiramos el agua y dejamos escurriendo la calabaza hasta que esté ya fría.
Iremos cogiendo los trozos y le vamos quitando todas las pepitas.
Apretamos entre las manos para quitar el agua que aún pueda tener.
Con los dedos iremos deshilachando la carne de la calabaza facilmente y pesamos la cantidad obtenida.
En la receta original se debe utilizar la misma cantidad de azúcar que de calabaza, yo pongo la mitad.
Si tengo 1 kilo de calabaza ya hervida, sin pepitas y sin agua le añado 1/2 kilo de azúcar solo.
En una olla amplia pondremos la calabaza deshilachada, el azúcar, la corteza de una naranja y el palito de canela. También el anís si optais por él.
Ponemos a fuego lento e iremos removiendo de vez en cuando con una cuchara de madera.
Al principio veremos que hay líquido que poco a poco va espesando y cambiando a un bonito color caramelo. Ahora es cuando no podemos dejar de remover para que no se pegue al fondo de la olla.
Cuando la mezcla sea espesa y ya no podamos evitar que se vaya a pegar es porque se está caramelizando y ya está listo nuestro dulce.
Dejamos enfriar y distribuímos en botecitos mejor de cristal.
La corteza de naranja y los palitos de canela podéis dejarlos o quitarlos a vuestro gusto.
Guardaremos en el frigorífico hasta su uso y también lo podemos congelar.
Dale una oportunidad a este dulce que no lo es tanto si lo haces como yo y si no abusas en los rellenos que prepares...menos ..es mejor!
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